Ignoraba esta sensación torturadora del tiempo que, por detrás, nos clava la mirada en la espalda y, por delante, espera nuestro paso para tendernos una emboscada.
Agüí, el monstruo del cielo, Kenzaburo Oé, 1966.
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3 comentarios:
;-)
Maravilloso texto, ¿verdad?
jeje, no soy canario, soy de los madriles (como tú, ¿no?). Lo del "usted" no era un uso ortodoxo, sino más bien estilístico. Cuando escribo a veces trato de usted a mis mejores amigos. Es como una ironía, un juego, una pretensión de seriedad que normalmente no corresponde con el texo :)
Vaya chapa te he metido...
El tiempo es muy traicionero
Sí, efectivamente, soy de los madriles, como usted ;-)
En este ático nos encantan los jueguecitos. Y los visitantes asiduos, claro X-D
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