Leo en el blog de mi amiga mluz (qué poco nos vemos, maja :-/ ) que Blur Ediciones le ha publicado un libro. Una noticia fantástica que acaba de conseguir un hito: que yo postee dos días seguidos por primera vez en meses.
Hace casi un año tuve ocasión de ver una pequeña pero muy estimulante exposición con parte de los dibujos y textos que conforman este librito. Me encantó. Los dibujos, rápidos apuntes del natural, tenían una frescura y una espontaenidad encantadoras. Quizás sólo los que se han (o nos hemos) pegado alguna vez con el difícil arte del dibujo al natural puedan comprender la dificultad que se oculta detrás de esa aparente simplicidad. Lo que es indudable, sin embargo, es su admirable capacidad para escoger siempre el enfoque adecuado para componer un fresco vívido del día a día de esta ciudad. Los textos, además, acompañan y amplifican ese fresco apuntando pequeñas historias, casi haikus, de lo que pudo ser o, quizás, fue. Una delicia.
La noticia me congratula. Primero, obviamente, por amistad; después porque de esta forma voy a poder llevarme a mi casa ese pedacito de vida volcado en el librito; y, finalmente, por lo que de buen saber hacer tiene esta colección de Blur. En los últimos meses me había venido llamando la atención estos pequeños libritos que pululan en ciertas librerías (las buenas, claro). La editorial ha creado un blog, Libros de Blur, donde uno puede perderse un buen rato hojeando estos libros. En el texto justificativo del blog dicen lo siguiente:
Disfruten con los libros de Blur. Y, ya saben, sean curiosos y felices ;-)
Hace casi un año tuve ocasión de ver una pequeña pero muy estimulante exposición con parte de los dibujos y textos que conforman este librito. Me encantó. Los dibujos, rápidos apuntes del natural, tenían una frescura y una espontaenidad encantadoras. Quizás sólo los que se han (o nos hemos) pegado alguna vez con el difícil arte del dibujo al natural puedan comprender la dificultad que se oculta detrás de esa aparente simplicidad. Lo que es indudable, sin embargo, es su admirable capacidad para escoger siempre el enfoque adecuado para componer un fresco vívido del día a día de esta ciudad. Los textos, además, acompañan y amplifican ese fresco apuntando pequeñas historias, casi haikus, de lo que pudo ser o, quizás, fue. Una delicia.
La noticia me congratula. Primero, obviamente, por amistad; después porque de esta forma voy a poder llevarme a mi casa ese pedacito de vida volcado en el librito; y, finalmente, por lo que de buen saber hacer tiene esta colección de Blur. En los últimos meses me había venido llamando la atención estos pequeños libritos que pululan en ciertas librerías (las buenas, claro). La editorial ha creado un blog, Libros de Blur, donde uno puede perderse un buen rato hojeando estos libros. En el texto justificativo del blog dicen lo siguiente:
[...] Siempre que los autores estén de acuerdo, intentaremos ofrecer la versión on-line de los libros que editamos. Se trata de compatibilizar nuestra viabilidad empresarial y los derechos de los autores con otro derecho fundamental, el del acceso a la cultura. Creemos que pueden convivir perfectamente.Todo un ejemplo de sentido común difícil de hallar en estos días de "artistas" que persiguen enfervorizados al resto de la humanidad y usuarios que se auto-otorgan el derecho a consumir todo tipo de material cultural sin soltar jamás un solo duro. Qué gusto da toparse de vez en cuando con algo de sentido común.
Puedes enlazar cualquiera de los e-libros desde tu blog o tu página web, siempre que no se cobre el acceso a ella y a sus contenidos. También puedes imprimir una copia para tu uso personal (por ejemplo, en países donde es difícil conseguirlos) pero no duplicar ni comercializar con copias, sean impresas o no. Los textos e imágenes que aparecen en los libros son propiedad de sus autores, que amablemente han autorizado su reproducción en este blog. Ellos han sido generosos, no abuses de ello. Reservados todos los derechos.
Disfruten con los libros de Blur. Y, ya saben, sean curiosos y felices ;-)
2 comentarios:
Interesting indeed! I arrived here just surfing, but I think I’ll be coming back again from time to time.
Best wishes from an Estonian living in Italy
Parece bastante lógico. ¿Sería lo mismo ver pelis y escucharlas gratis en casa, y pagarlas cuando las degustas en el cine o en un concierto?
agur!
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