A pesar de mi escepticismo -y del rebuscado eufemismo de la banda terrorista-, no puedo menos que hacerme eco de la (esperadísima) noticia del día. Como de costumbre, Nacho Escolar se ha encargado de realizar un seguimiento de la noticia en la web. Podéis leerlo
aquí.
4 comentarios:
Mucho me temo que tengo que ser más escéptica aún si cabe en este punto. Hoy todo son felicitaciones y andarse con pies de plomo, pero visto lo visto a propósito del 11-M...
A mí me parece que el proceso qeu se avecina está más preparado de lo que parece, pero bueno. Me alegro, auqnue siento que las posturas enfrentadas son difícilmente reconciliables, sobre todo cuando, presentes en el mismo, tinen (deben, claro) estar parsonas, que aunque representen a una gran mayoría de los españoles, adolecen de una soberbia infinita, de poca capacidad de ver las cosas desde el punto de vista de los demas, y (sobre todo) que tienen como primera prioridad mantener una idea de cómo son las cosas que está ya vacía de realidad, que se sostiene sólo por el propio empeño suyo de intentar mantenerla, así, en el vacío...
(para aligerar) "bjmqdpp" bájame de aquí, déjame lejos de pepe (o del pp)
Ciertamente, esto no es más que la crónica de una tregua anunciada. Y, en efecto, los síntomas de que estamos ante algo nuevo son numerosos. Ayer se escucharon muchas voces desde el País Vasco que hubieran sido impensables en escenarios anteriores. Y el terrorismo, sin base social, está condenado al fracaso.
Otra cosa es el cierre de las heridas abiertas. El año pasado realicé un precioso viaje por el País Vasco. Me impactaron sus paisajes, su modo de vida, su gastronomía. Pero también me impactó la profunda sima que divide en dos a su sociedad, palpable en cada esquina, en cada establecimiento, en cada pequeña reunión de gente.
Y otra cosa es, también, el civismo y la responsabilidad con la que se afronte todo esto. Civismo y responsabilidad que ya ayer comenzaban a escasear en determinados foros. Sin ir más lejos, en Libertad Digital alguien sostenía que el que la tregua se declarara el 22-M era claramente una reivindicación del atentado del 11-M. La ecuación, para esta mente privilegiada, no podía ser más clara: 11-M x 2 años = 22-M.
Y todo esto no sería más que la triste expresión de alguien obcecado en sus dogmas de fe si, como seguro ocurrirá, no encontrara eco posterior en determinados sectores de nuestra "política" y nuestro "periodismo".
Agárrense a los machos, que llegan curvas.
"xttjpl": ¡extra, extra! ¡joven pareja localizada!
El tema vasco es complejo, admitámoslo, sólo hay que echarle un vistazo a la peli de "la pelota vasca..." Es un tema en el que confluyen muchos intereses, muchos hechos históricas (demasiados quizás) y la existencia de dos Euskadis que tienen mucho (ambas), en su realidad social del ciudadano de a pie (que admitmoslo también, no conoce todos los elementos de essa compleja realidad a la que aludía antes) de sustentación sobre la propia idea, donde las razones originales apenas se palpan, vacías ya de contenido a base del paso del tiempo y del uso excesivo de ellas.
Cuando viví en Francia, me tocó compartir la vida con un gran grupo de estudiantes vascos que representaban casi todos los sectores de la sociedad vasca. La verdad que ahí aprendí mucho de esa realidad. Desde los (casi) abertxales hasta los conservadores, españolistas, los moderados... En realidad, todos, en aquella pequeña comunidad que teníamos, vivían en una gran armonía, pero también era consciente que hacían un ejercicio bastante grande para evitar hablar de ciertos temas. Ante los demas y entre ellos. Entendí todas las posturas (hablaban, eso sí, por separado y en la intimidad), y ninguna me convencía, todas reclmaban demasiadas cosas. Todas se afirmaban como tolerantes, pero en el fondo tenían mucho de autosugestión para argumentar lo insostenible. Llegué a escuchar cosas realmente duras, difíciles de entender. Y, desde mi propio conomimiento del nacionalismo (en mi caso, el gallego) desde dentro, llegué a la conclusión de que realmente es imposible opinar sobre la realidad vasca sin ser partícipe de ella. Son los vascos los que deben decidir, sin duda, sobre su realidad. Todos sabemos que hay cierto sector de la política (y de la sociedad) que siente pánico ante la pérdida de control de un proceso así desde Madrid. Si tienen miedo, ¿no será porque saben bien que sus tesis no son las de la mayoría de los vascos?? No lo sé, pero me temo que sí. Yo no entiendo un proceso hacia la paz sin una negociación de interesas en la que todos estén representados, pero también en la que todos estén dispuestos a ceder. LAs reglas básicas de la negociación pasan por ello, no existe otra forma. Pero mientras haya personas que piensen que son otros los que deben renunciar (y ni siquera entiendan que la actitud de los terroristas, a pesar de ser un hecho que no debe ser aceptado como moneda de cambio, sí debe ser entendido como una voluntad, un gesto hacia otra forma de intentar la reconciliación...). Es una pena, porque algunos entienden que no hay nada que reconciliar, y ahí está (en mi opinión) el verdadero problema...
"cuixrf" con unos ingleses extra-guapos me fui a hacer surf
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